Alexa Moreno.

Alexa Moreno, la aplaudida gimnasta mexicana que llevó esa disciplina a niveles nunca antes vistos, tuvo que sufragar de su bolsa los gastos en instrumentos que le faltaban previo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, según reveló una representante de la agencia que la representa.

Este dato se da a conocer junto con dos hechos igualmente controvertidos. Por un lado, la revista Forbes revela que Ana Gabriela Guevara, directora general de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), extinguió el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar) usado para pagar mil 97 becas vitalicias a medallistas olímpicos.

Por el otro, el resultado del medallero: México se disputa el lugar 75 con Azerbaiyán y Kazajistán. La cosecha ha sido pobre, pese a que la promesa fue ganar 10 medallas y superar la actuación de las Olimpiadas de México en 1968, cuando se ganaron nueve preseas —3 de oro, 3 de plata y 3 de bronce—, y la cual ha sido hasta la fecha la mejor actuación nacional.

Frida Martínez, cofundadora de Athlete Booster, agencia que representa a la gimnasta Alexa Moreno, dio cuenta de uno de los elementos con los que tienen que lidiar los atletas de alto rendimiento: la falta de recursos. En un hilo compartido en su cuenta de Twitter defendió la actuación de Moreno y compartió que la gimnasta tuvo que lidiar con ciertos aspectos.

“Ella se compró con su premio nacional del deporte sus aparatos para poder entrenar a falta de tener los adecuados en México (Urge infraestructura para el alto rendimiento)”, publicó en un primer tuit. En otro añadió: “Se la rifó con todo y que trae una MEGA lesión en el hombro y así entrenó y se la partió por meses para llegar hasta aquí, ahora irremediablemente tendrá que hacer una visita al quirófano”.

La gimnasta Alexa Moreno Medina hizo historia al alcanzar el cuarto lugar de salto de caballo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Moreno Medina consiguió  se convirtió en la segunda gimnasta mexicana en competir en una final olímpica desde Denisse López, en Sídney 2000.

Cuestionada en entrevista sobre los gastos que tuvo que cubrir por su cuenta la atleta mexicana y si han tenido acercamiento son las autoridades sobre este tema, Martínez dijo que eso no se podía dar a conocer por tratarse de “datos más privados de Alexa”.

Martínez precisó además en Twitter que el costo anual para que un atleta de alto rendimiento compita un año a nivel mundial va de uno a cuatro millones de pesos y contempla “comida, renta, transporte, equipos de entrenamiento que se requieran, equipos multidisciplinarios (nutriólogos, fisioterapeutas, psicólogos, entrenadores) sus viáticos para asistir a competencias nacionales e internacionales”.

“Los principales patrocinadores que permiten que nuestros atletas estén en donde están son los padres de familia y círculo cercano. Gracias a dios cada día más sponsors se suman a su causa y aligeran la carga”, señaló.

Respecto a si esta era la situación de Moreno, Martínez dijo que se refería al deporte de alto rendimiento mexicano en general.

GUEVARA EXTINGUE FODEPAR

El pasado 24 de junio de 2021, Ana Gabriela Guevara, titular de la Conade y exmedallista olímpica en Atenas 2004, envió un oficio a Rosa Elena Torres Dávila, directora Jurídico Fiduciaria del Banco Nacional del Ejército Fuerza Aérea y Armada (Banjercito) para solicitar la extinción del Fodepar, como reportó la revista Forbes, que tuvo acceso al documento.

El fondo, refiere el medio, enfrenta además dos juicios laborales ante la Junta Especial Número Seis de Federal de Conciliación y Arbitraje por 714 mil pesos Julio César Ramos Escobedo y otro de  629 mil pesos por Alejandro Silva Behar.

Cada mes destinaban más de 20 millones 359 mil pesos para el pago de las becas de los medallistas y sus entrenadores, según la lista de beneficiarios que comprendía becas vitalicias a futbolistas que ganaron la medalla de oro en los Juego Olímpicos de Londres 2012.

También aparecen Ana Gabriela Guevara Espinoza, los clavadistas Fernando Platas Álvarez, Paola Espinosa Sánchez, Rommel Pacheco, entre otros atletas que —según los mismos datos— recibieron apoyos de este fideicomiso creado en 1998.

Este fideicomiso es de los más de 100 cancelados por órdenes del Presidente Andrés Manuel López Obrador con el que se daba apoyo económico a atletas de alto rendimiento. Aunque su uso ha estado ligado a irregularidades desde pasadas administraciones.

Durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, el Comité Olímpico Mexicano (COM) denunció que el entonces director de la Conade, Alfredo Castillo, utilizó recursos de este Fondo para pagarle miles de pesos mensuales a sus amistades como Israel Valero, Ricardo Langre y Julio César Everardo, entonces representantes de diferentes instituciones deportivas.

Pero los escándalos durante la gestión de Castillo, quien fue inhabilitado por la Secretaría de la Función Pública (SFP), continuaron tras la llegada de Guevara. En los últimos tres años, la Comisión ha sido blanco de señalamientos por el recorte de becas, falso antidoping y amiguismo.

Además, la Función Pública siguió detectando irregularidades en el Fodepar, a lo que se suma una reciente auditoría de la Cuenta Pública 2019 sobre falta de documentación para comprobar pagos de contratos millonarios para bienes y servicios que concluyó en una denuncia de extorsión contra la excorredora. La también exsenadora del Partido del Trabajo (PT) se ha defendido ante cada flecha lanzada en su contra y ha negado las irregularidades.

RECORTE A BECAS ENTRE GASTO IRREGULAR

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) identificó inconsistencias que de manera reiterada cometieron en 2019 servidores públicos de la Conade en la comprobación del uso de recursos públicos de “Atención al Deporte”, un programa destinado a otorgar servicios integrales para elevar el nivel competitivo de los atletas de alto rendimiento.

En ese año, el primero de gestión de Ana Guevara y cuando se celebraron los Juegos Panamericanos de Lima, la institución contó con un presupuesto de 679 millones 135 mil pesos para dicho programa. Por falta de documentación suficiente que acreditara la totalidad de los pagos o servicios recibidos, las irregularidades en contratos por adjudicación directa sumaban un monto por aclarar por 186 millones 706 mil pesos, el 27 por ciento del presupuesto de ese rubro.

A la par de ese cuestionado gasto, en junio del 2019 diversos atletas acusaron el recorte de sus becas provenientes del Fodepar como el deportista olímpico de judo Nabor Castillo Pérez, cuyo apoyo pasó de 5 mil a 2 mil pesos o la clavadista de altura y medalla de oro en Fina 2017, Adriana Jiménez, quien meses después ganó un amparo para que se le devolviera la beca de 20 mil pesos. Los montos iban de los mil a los 30 mil pesos y dependían de la categoría.

Ante la disminución del monto, la Conade argumentó que se encontraron inconsistencias de deportistas que ya no están activos o que no cumplen con un sustento técnico que lo respalde. La directora Ana Gabriela Guevara aseguró que en agosto de 2019 se les acabaría el recurso al grado de que ya no podrían pagar lo básico como la luz por el recorte presupuestal de 70 millones de pesos.

“Para los atletas se volvió normal tocar la puerta de la dirección y recibir apoyos discrecionales”, declaró aquel verano en una comparecencia ante Senadores.

En una previa entrevista televisiva incluso lo calificó de berrinche. “Sí hay recursos, lo único que hicimos fue pedirle a los atletas que ayuden con los ajustes, que den resultados. Esto se dio porque revisando paso por paso se encontró con 130 atletas irregulares dentro del Fodepar y entre esos deportistas hubo quien se quejó que ganaba más un joven dentro del programa de Construyendo el Futuro”, el medallista de judo Nabor Castillo.- Sin Embargo.